Te voy comentando...
Después de estudiar detenidamente la Unidad 1, estás preparado/a para demostrar que te has enterado de todo y que te atreves a lanzarte con tu primer comentario. Te recuerdo lo que te pido y te pongo el esquema y después te pongo el texto. Así que... ¡A por ello! Tienes hasta el 5 de diciembre.
Plan de trabajo para realizar comentarios de texto filosóficos
Vamos a seguir ese planteamiento de tres partes. Te especifico qué debes poner en cada una de ellas. Normalmente los comentarios los harás en casa por lo que podrás consultar los diferentes manuales o incluso en Internet. Así que no te preocupes que los vas a hacer muy bien. En Bachillerato, muchas veces los exámenes son comentarios de texto, así que es una buena herramienta para aprender.
Parte 1: Introducción
Parte 2: Desarrollo
Parte 1: Introducción
- Objetivo: presentar la obra y al autor del texto. Indicar qué texto (fragmento) específico se va a comentar.
- Del autor mencionar su época (Antigua, Medieval, etc.) y el siglo en el que vivió. Si el texto que nos dan no incluye a su autor y obra, identificarlo. Se puede mencionar también la corriente filosófica a la que pertenece y los filósofos que más le influyeron. Piensa que esto casi se puede hacer en un renglón.
- Ha de ser breve y proporcional a la extensión total del ejercicio.
- Se plantean los problemas tratados en el desarrollo del ejercicio y que conducen a la conclusión.
Parte 2: Desarrollo
- Objetivo: exponer ordenada y detalladamente todas las ideas contenidas en el texto.
- Debes identificar el tema principal, es decir, enunciar la idea central en torno a la que gira el texto, el tema que engloba todo que se expone y que da sentido a todo el texto. También debes ser capaz de establecer una relación con otras tesis del autor que ayuden a comprender mejor el texto.
- Puede haber varios temas además del principal.
- Una buena exposición muestra una lectura atenta al desarrollo, argumentación y progreso de las ideas del autor. No pasa por alto ninguna de las ideas presentes en el texto, señalando frases o términos que dan pie a aclarar su significado. Expresa las ideas del texto con palabras propias.
- Según se expone el texto, debe aprovecharse para explicar el significado de la terminología técnica que utiliza el autor, sólo de aquellas pocas (una, dos o tres) que requieren una explicación filosófica.
- Ojo, ten en cuenta que una mala exposición:
- Es una simple enumeración de temas o ideas, sin establecer ninguna conexión entre ellas.
- Es general, alude a muchas ideas del autor pero sin enlazarlas con frases o expresiones del texto.
- Parafrasea el texto: repite el texto con casi sus mismas palabras.
Parte 3: Conclusión
- En la conclusión, que ha de ser breve, se valoran los resultados a que conduce el comentario.
- Básicamente es un breve resumen del tema principal del texto, señalando su evolución o repercusión en la filosofía posterior.
- Por último se debe añadir una reflexión personal sobre la vigencia actual de (todas o algunas) de las ideas del texto.
La extensión debe de como máximo dos caras de folio. Por eso se valora lo conciso y lo breve y claro que se escriba el comentario. Piensa que debe ser proporcional y que la parte central es la más extensa. La Introduccíón y la conclusión deben ser más o menos igual de extensas. Si tuviéramos que dividir el 100% de la extensión, la Introducción tendría un 25%, el desarrollo un 50% y la conclusión un 25%. Para que te hagas idea.
Rúbrica de Evaluación para los comentarios de texto filosóficos
"Así pues, ésta es la verdad y lo reconocerás si te diriges a las cosas de mayor importancia, dejando ya la filosofía. Ciertamente, Sócrates, la filosofía tiene su encanto si se toma moderadamente en la juventud; pero si se insiste en ella más de lo conveniente es la perdición de los hombres. Por bien dotada que esté una persona, si sigue filosofando después de la juventud, necesariamente se hace inexperta en todo lo que es preciso que conozca el que tiene el propósito de ser un hombre esclarecido y bien considerado. En efecto, llegan a desconocer las leyes que rigen la ciudad, las palabras que se deben de usar para tratar con los hombres en las relaciones privadas y públicas y los placeres y pasiones humanas; en una palabra ignoran totalmente las costumbres. Así pues, cuando se encuentran en un negocio privado o público, resultan ridículos, del mismo modo que son ridículos, a mi juicio, los políticos cuando, a su vez, van a vuestras conversaciones y discusiones"
PLATÓN, Gorgias, "Discurso de Caliclés sobre la filosofía" 484c y ss, Madrid, Gredos, Obras Completas Tomo II.
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